¿Está planeando una visita a Valencia? En este post hemos elaborado una lista de las seis mejores zonas donde alojarse en Valencia para que pueda disfrutar al máximo de esta ciudad tan fascinante.
En Valencia, podrá pasar días relajándose en sus playas o visitando los monumentos de la ciudad. Podrá sumergirse en su vibrante estilo de vida y su cultura, y disfrutar de lo mejor de la cocina mediterránea española con los famosos arroces de Valencia.
También podrá salir de fiesta por las noches en las numerosas fiestas y festivales que se celebran durante todo el año.
Siga leyendo para conocer nuestras recomendaciones sobre las mejores zonas donde dormir en Valencia, tanto en invierno como en verano.
Las mejores zonas donde alojarse en Valencia
1. Ciutat Vella, donde alojarse en Valencia en el casco antiguo
Situada en la costa mediterránea española, Valencia tiene más de 300 días al año de veranos cálidos e inviernos suaves.
La ciudad está dividida en 19 distritos administrativos, cada uno de ellos dividido en barrios. Ciutat Vella es uno de estos distritos y la zona histórica del casco antiguo de la ciudad.
Con una historia que se remonta a más de 2000 años, a la época romana, hay mucho que descubrir en el casco antiguo.
Sumérjase en la cultura y el estilo de vida de los valencianos mientras pasea por las estrechas calles empedradas y los callejones del casco histórico.
Admire algunas de las arquitecturas más antiguas de Valencia y deténgase a tomar un café en alguna de sus bulliciosas plazas.
Aunque la ciudad de Valencia está bien comunicada por un sistema de transporte público limpio y fiable de taxis, autobuses, metro y trenes, Ciutat Vella es una zona que realmente debe explorarse a pie o en bicicleta.
Allí encontrará la Catedral de Valencia. Construida en el siglo XIII, fue en su día un templo y luego una mezquita antes de convertirse en iglesia. Alberga el museo más antiguo de la ciudad, con obras de Goya y Maella.
Tómese un tiempo en la plaza en la que está situada con sus fuentes, y suba los más de 200 escalones de la Torre del Miguelete para disfrutar de unas impresionantes vistas de la ciudad. También encontrará cerca la Lonja de la Seda.
Con edificios góticos de finales del siglo XIV, es patrimonio mundial de la UNESCO.
El centenario Mercado Central también está cerca. Se trata principalmente de un mercado de productos con unos 300 puestos, cuya visita es muy recomendable, aunque sólo sea para conocer de primera mano la vida cotidiana de los valencianos.
La construcción del edificio también puede ser interesante. Es una mezcla de intrincados trabajos de hierro forjado, vidrio y cerámica con una cúpula de cristal de 30 metros de altura.
En los alrededores del barrio de El Carme, en Ciutat Vella, encontrará otros edificios y monumentos históricos.
Busque las torres defensivas del siglo XIV Torres de Serranos y Torres de Quart, el Instituto Valenciano de Arte Moderno, la antigua casa y ahora museo del artista español José Benlliure, y la Iglesia del Carmen.
Con una buena selección de tiendas, cafés, supermercados y mercados locales, es también uno de los barrios más populares para la vida nocturna.
Cuando el día se convierte en noche, llegan solteros, parejas y grupos de todas las edades para disfrutar de los numerosos cafés/bares, restaurantes y discotecas de la zona.
Elija el barrio de El Pilar si quiere estar en el centro de Ciutat Vella. Está a un corto paseo del casco antiguo, y con la estación de metro Angel Guimera cerca, tiende a ser un poco más tranquilo durante las noches que El Carme.
Otros lugares de interés en el distrito de Ciutat Vella son:
- La Iglesia de Santo Domingo
- La Iglesia de San Juan del Hospital
- Los Jardines de la Glorieta
- El Parque del Parterre
- El Parque de la Cultura
- El Ayuntamiento
- El Museo de la Ilustración y la Modernidad de València, y el Palacio de Justicia
El alojamiento en todos los barrios de Ciutat Vella es razonable, con Airbnb, hostales, pensiones, apartamentos, hoteles boutique y de alta gama y villas.
2. Ruzafa, donde dormir en Valencia en una zona céntrica y animada
Aunque está situado justo al sur del casco antiguo, el barrio de Ruzafa es completamente diferente a éste.
Esta zona de la ciudad, que hace 15 años estaba algo deteriorada, se ha transformado en una zona de moda con estilo bohemio, con talleres y tiendas de artesanía, comercios locales y estudios artesanales.
Ahora es una de las zonas más buscadas de la ciudad para vivir, y también es una zona muy popular para alojarse en Valencia.
La gastronomía ha jugado un papel importante en el renacimiento de Ruzafa, con algunos de los mejores chefs de Valencia abriendo restaurantes en el distrito y una buena oferta de cocinas que ofrecen lo mejor de la cocina asiática, italiana, mexicana e india.
Las cervecerías artesanales se han establecido para dar servicio al creciente número de cafés y restaurantes con populares cervezas artesanales y vinos locales. Por otro lado, las panaderías locales ofrecen una apetitosa selección de pasteles, bollería y productos salados.
Aunque no está especialmente dotado de arquitectura y monumentos históricos, Ruzafa ofrece un ambiente propio que no se encuentra en otros barrios de la ciudad.
Si ha elegido Ruzafa para dormir en Valencia, reserve tiempo para recorrer la zona a pie, para conocer lo que hace a este barrio tan diferente.
Si lo suyo es la moda retro, encontrará ropa, bisutería y complementos en sus numerosas boutiques vintage.
Si busca una pieza única de cerámica o de arte, explore las pequeñas galerías independientes y las tiendas de artesanía para encontrar esos recuerdos únicos.
Tampoco deje de visitar el mercado local, que es el centro y punto de encuentro de locales y visitantes.
Para descansar un poco, deténgase en uno de los muchos cafés/bares para comer bocadillo, una tortilla o un plato de tapas, y para disfrutar mientras se observa el ir y venir de los comerciantes y oficinistas locales.
Por la noche, puede darse el gusto de cenar en el Canalla Bistro, dirigido por el propio chef de Ruzafa, Ricard Camarena, galardonado con una estrella Michelin, o en uno de los muchos y excelentes restaurantes locales que sirven una variedad de platos regionales populares.
El alojamiento en Ruzafa es variado, con albergues, Airbnb, apartamentos con cocina, casas de huéspedes, villas de 5 estrellas y hoteles boutique.
3. Extramurs, a dos pasos de Ciutat Vella
A principios del siglo XX, con el aumento de la población que vivía en Valencia, se decidió ampliarlo fuera de las murallas de la ciudad. El distrito 3, al sur de Campanar, y con el Eixample y el centro de la ciudad al este, fue la zona elegida.
La mayor parte de los edificios de Extramurs se construyeron entre 1900 y 1960 y abarcan varios estilos. Es un próspero distrito residencial y comercial, donde viven tanto vecinos acomodados como de clase trabajadora.
Los centros comerciales, las instalaciones de ocio y los hoteles; las coloridas cafeterías, los restaurantes, los bares de copas de moda, los pubs, las discotecas, los colegios y los hospitales, además de una gran cantidad de espacios verdes, hacen de Extramurs uno de los lugares más populares de Valencia para buscar casa.
Con su alojamiento atractivo y a buen precio, también es una zona que se ha convertido en una base cada vez más popular para miles de los dos millones de personas que visitan Valencia cada año.
No tiene sitios turísticos para visitar al ser una zona residencial, pero esto se compensa con su excelente sistema de autobuses y metro, que le llevará a la zona del casco antiguo en cuestión de minutos. También alberga la estación central de ferrocarril de Valencia.
Entre los pocos lugares de interés de la zona se encuentra la Finca Roja, un gran bloque de apartamentos con más de 370 viviendas.
Construido a principios de los años 30, es un bloque de viviendas sociales financiado por el ayuntamiento de Valencia para dar alojamiento a los numerosos maquinistas e ingenieros de clase media que trabajaban en las fábricas de la periferia de la ciudad.
Su nombre, Finca Roja, se traduce en inglés como Red Estate. El rojo es el color de los ladrillos utilizados en la construcción del complejo.
Visite el Jardín de las Hespérides, un agradable espacio abierto con plantaciones de varias especies de cítricos.
Muy cerca se puede visitar el atractivo jardín botánico de la Universidad de Valencia, situado en Quart 80 y fundado en 1567. Allí también podrá visitar su Herbario, con más de 10.000 plantas conservadas desde el Renacimiento.
Para ir y venir, el metro desde la estación de Guimerá le llevará al casco antiguo en sólo tres paradas, bajando en la estación de Colón.
Para salir por la noche, hay excelentes bares de tapas, restaurantes locales e internacionales y bares en los que disfrutar de una agradable velada con gente afín.
Si elige Extramurs para dormir en Valencia, el alojamiento es abundante y a precios competitivos, con alquileres privados, apartamentos, casas y B&B, y una selección de hoteles a precios atractivos.
4. Quatre Carreres, el barrio de la Ciudad de las Artes y las Ciencias
Situado al sur de L’Eixample, Quatre Carreres, una antigua zona rural y agrícola hasta finales del siglo XIX, se ha convertido en una de las más modernas atracciones turísticas de Valencia para toda la familia. Gracias en gran medida a la Ciudad de las Artes.
Tras una gran inundación en 1957, se desvió parte del río Turia que atravesaba el barrio, y el antiguo lecho del río se convirtió en un gran parque.
En la década de los 70 se iniciaron las obras de mejora de las infraestructuras del barrio, y un gran proyecto de urbanización para proporcionar viviendas asequibles a un número creciente de residentes.
En los años 90 se construyó un nuevo hospital, se completó un amplio complejo comercial y de ocio, se levantaron nuevos hoteles y se inició la Ciudad de las Artes.
Se pusieron los primeros ladrillos de este complejo futurista en la zona sureste del cauce del río. Consta de seis estructuras y dos puentes.
Diseñado por Félix Candela y Santiago Calatrava, las obras comenzaron en 1996. El primer edificio innovador, L’Hemisfèric, un cine IMAX, planetario y laserium, se inauguró en 1998.
En el año 2000 se inauguró el Museo de las Ciencias Príncipe Felipe. Construido en forma de ballena, es un museo científico interactivo de tres plantas.
En 2001 se inauguró L’Umbracle, con un fabuloso paseo ajardinado que destaca las especies vegetales autóctonas de Valencia, y el Paseo de las Esculturas, una galería al aire libre con obras de escultores de todo el mundo.
En 2003 se inauguró L’Oceanogràfic, el mayor complejo acuático al aire libre de Europa, con 110.000 metros cuadrados y 42 millones de litros de agua recirculada y filtrada.
Cada edificio del complejo representa diferentes zonas y ambientes, desde el Mediterráneo hasta los humedales y mares tropicales, pasando por el Mar Rojo y el Ártico.
En 2005 se inauguró el Palau de Les Arts Reina Sofía. Centro cultural de la música y las artes escénicas, está rodeado de 87.000 metros cuadrados de estanques ornamentales y zonas ajardinadas, y más de 10.000 metros de senderos.
En 2007 se inauguró el primer puente. El puente de Montolivet utiliza la antigua calzada y una nueva construcción para cruzar el antiguo cauce del río seco.
En 2008 se inauguró el segundo puente. El puente de Assut de l’Or conecta con la calle Menorca por el lado sur y también cruza el cauce seco. Su torre central principal alcanza los 125 metros de altura y es el punto más alto de Valencia.
Finalmente, en 2009 se inauguró la última pieza del actual complejo. L’Àgora es un importante recinto de conciertos y deportes que acoge actuaciones en directo, conciertos, eventos deportivos, exposiciones y convenciones.
En la actualidad se están llevando a cabo proyectos para ampliar el complejo.
Para las noches, la zona cuenta con una excelente selección de restaurantes locales e internacionales. Se puede disfrutar de una paella valenciana, de la Fideuà, pescado fresco y fideos, o del All i pebre.
El alojamiento es bueno en todas las gamas, desde los apartamentos en alquiler vacacional hasta el lujo de 5 estrellas. Lo mejor de todo es que si elige Quatre Carreres para alojarse en Valencia, estará a sólo cinco minutos a pie de Ruzafa y de la zona de la Gran Vía, y a un agradable paseo de 20 minutos del casco antiguo.
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5. La Zaidía – Benimaclet, donde alojarse en Valencia barato
Limitada por Benimaclet en el norte, la Zaidía es otro barrio rural que inicialmente se encontraba fuera de las antiguas murallas de la ciudad, y lleva el nombre de un antiguo palacio árabe.
Desgraciadamente, cientos de vecinos perdieron la vida en las inundaciones de 1957, pero la tragedia impulsó a las autoridades a desviar el río e iniciar un periodo de importante desarrollo en la zona.
Hoy en día, con cinco barrios y más de 50.000 habitantes, está conectada con el casco antiguo (Ciutat Vella) por cuatro puentes. Los puentes de la Trinitat, Serranos, San José y Fuste.
La Zaidía es una zona agradable y relajada para dormir en Valencia. Cuenta con varios parques atractivos, como los Jardines del Real, el Parque Municipal de Marchalenes y los Jardines del Turia.
Los Jardines del Turia, uno de los mayores parques municipales de España, se extienden a lo largo de más de 9 km de exuberante espacio verde.
Todos los parques están llenos de árboles, arbustos, fuentes burbujeantes, coloridos parterres, pájaros y vida silvestre, en los que podrá disfrutar de un rato de relax tras el ajetreo de las visitas turísticas.
Junto a los Jardines del Turia, también se encuentra la antigua estación de ferrocarril de Valencia de la década de 1890. Desde 1995 se utiliza como comisaría de policía. Detrás de la estación se encuentra la parada del tranvía Pont de Fusta, que le llevará a las playas.
Junto a la interesante arquitectura de la zona, encontrará un antiguo convento (El Convento de la Trinidad) y el Museo de Bellas Artes.
La zona está bien comunicada con todos los servicios que cabría esperar en un popular distrito residencial, incluyendo centros comerciales, cafés, bares y restaurantes.
Justo al suroeste de La Zaidía se encuentra el bonito barrio de Benimaclet.
Integrado en la ciudad de Valencia desde 1972, es una zona pintoresca y relajada de calles estrechas, edificios de poca altura y propiedades decoradas con brillantes azulejos.
Sin embargo, no se deje engañar por su fachada de pueblo. Un porcentaje considerable de los residentes de Benimaclet son estudiantes, jóvenes empresarios y expatriados que han elegido esta zona para quedarse en Valencia.
Estos colectivos aportan un ambiente juvenil y moderno al lugar que se puede encontrar en los concurridos cafés, bares y restaurantes.
Entre ambos distritos, el alojamiento para visitantes es abundante en todos los sectores, y los precios tienden a ser más bajos que en las zonas centrales de la ciudad. La zona también está bien comunicada por los servicios de autobús, tranvía y metro.
Al estar a medio camino entre Ciutat Vella y la playa, tanto si se quiere pasar un día de sol y playa, como si se quiere cenar en la ciudad, se puede llegar a ambos de forma rápida y sencilla.
6. El Cabanyal – Malvarrosa, dos fabulosas zonas de playa para toda la familia
Si su idea del paraíso es la de unas vacaciones de lujo con cubo y pala, no hay nada mejor que los alrededores y las hermosas playas de El Cabanyal (Las Arenas) y Playa Malvarrosa.
Comenzando cerca del puerto deportivo, la playa de arena fina y dorada de El Cabanyal tiene 200 metros de ancho y se extiende hasta donde alcanza la vista.
Una suave pendiente hacia el azul del Mediterráneo, y los socorristas de guardia durante la temporada, hacen que sea muy apropiada para los niños. También está bien equipada para ayudar a las personas con problemas de movilidad, con pasarelas de madera que se extienden hasta el mar.
La playa cuenta con muchas tumbonas y sombrillas de alquiler, con bares en la playa que venden aperitivos, bebidas, melón fresco y jugoso y otros productos imprescindibles para el sol.
A lo largo del amplio paseo marítimo, pavimentado y bordeado de palmeras, hay hoteles de lujo, villas, tiendas de recuerdos, bares, restaurantes y exclusivos clubes de playa.
Incluso si se aloja en uno de los complejos alrededor del puerto deportivo o en primera línea de playa, la zona residencial de El Cabanyal pide a gritos ser descubierta.
Es un barrio de calles estrechas y callejones, con coloridas casitas de pescadores de dos plantas y acogedores cafés, tiendas y bares locales que los turistas pueden explorar.
Sin embargo, el Cabanyal también se adapta a los tiempos. Su antiguo cine de los años 20 ha reabierto sus puertas como centro cultural que acoge conciertos, artes escénicas y conferencias empresariales.
Con el aumento de visitantes, también se están abriendo nuevos restaurantes que ofrecen lo mejor de la cocina regional y nacional. Muchos de ellos ofrecen entretenimiento en vivo mientras se cena.
Si quiere cambiar de aires, un paseo por el amplio paseo marítimo le llevará a la playa más famosa de Valencia. Al estar cerca del centro, la Playa de la Malvarrosa es la favorita de los residentes, especialmente durante los fines de semana.
Es una prolongación de las playas que comienzan con El Cabanyal, cerca del puerto deportivo, y que se extiende por más de 2 km a lo largo de la costa.
La Playa de la Malvarrosa es una playa muy limpia y apta para discapacitados. Dispone de muchas tumbonas y sombras, deportes acuáticos de todo tipo, pistas de voleibol de playa y un sinfín de actividades ideales para toda la familia.
El amplio paseo marítimo bordeado de palmeras de la parte trasera de la playa está lleno de hoteles, villas, bares y restaurantes con tiendas turísticas que venden toallas y ropa de playa, joyas y recuerdos.
De hecho, si elige Playa Malvarrosa para sus vacaciones de playa en Valencia, tiene todo lo que necesita en la zona.
Para descansar un poco del caluroso sol del verano, en la zona hay algunos jardines, tiendas y supermercados locales y algunos excelentes bares y restaurantes a muy buen precio..
Las noches tienen algo para todos, desde restaurantes a la carta hasta comida rápida para llevar. Si le gusta la actividad y el bullicio, quédese en las zonas del puerto deportivo y de la playa, donde los bares están abiertos hasta la madrugada.
Si prefiere bares familiares más relajados, busque en las zonas situadas detrás de la primera línea de playa.
El alojamiento en ambas zonas es excelente. Los alojamientos en primera línea de playa suelen ser más caros como es habitual.